A las afueras hay restos de un paredón que llaman "El Castillo". En su iglesia parroquial de la Asunción su presbiterio tiene un hermoso artesonado mudéjar.
Situado en una pequeña elevación del terreno en la margen derecha del río Valderaduey, se dice que aquí hubo hasta siete ermitas que dieron lugar a la formación del pueblo.
Dentro del mismo, lo mejor es caminar, y descubrir los rincones que nos deparan sus calles, observar las distintas casas que perduran del siglo XVIII y una casa-palacio en la Plaza Mayor donde destacan sus ventanas y el escudo. Al lado se encuentra una vieja panera en la que todavía se conservan los artilugios donde se cocía el pan.
En la parte de abajo del pueblo está la iglesia parroquial de la Asunción del siglo XVII y de estilo barroco. En el presbiterio no conviene perderse su artesonado mudéjar, así como el retablo del siglo XVIII con imágenes que representan hechos que van desde la Anunciación hasta la Muerte de Cristo. Pertenece a la escuela de Juan de Juni. Además posee una espadaña de ladrillo. Pueden visitarse contactando con el Ayuntamiento.
Las primeras fiestas del pueblo se celebran el día de San Isidro, el 15 de mayo, donde se celebra una comida para todos los vecinos invitados por la hermandad. Ya en agosto, en los días entorno a la Virgen, se celebran las fiestas de San Roque y Nuestra Señora de la Asunción, con una gran chocolatada y verbenas.
Si deseamos descansar, existe una casa rural en la calle que baja de la Plaza Mayor, junto a la panera antes mencionada, en la que podremos disfrutar de un ambiente agradable, de lo mejor de la Tierra de Campos.